Poema de Tadeo Fuentes
- revistadigitalmyst
- 5 ago
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Relicario amarillo
sed y montaña.
Hablo desde el tacto,
desde la apología de los dedos,
de sus yemas resquebrajadas.
¿Quién dijo que la fuerza es ferocidad?
Una leve caricia basta para dormir entre las fieras.
Un movimiento de su palma es capaz
de poetizar la carne indómita.
No me refiero a la vista,
no voy hacia el horizonte
es más acá,
es la superficie.
El contorno agudo de las cosas.
Sed y montaña
lamen por debajo de las uñas,
de las nuestras
que acarician el aire.
Por Tadeo Fuentes (Instagram: @tadee.fuentes)





